
Las venas varicosas ocurren cuatro veces más en mujeres que en hombres. La variedad de métodos modernos para tratar las venas varicosas de las extremidades inferiores le permite elegir la estrategia más eficaz para resolver el problema.
Para normalizar el estado de las venas, se pueden utilizar opciones quirúrgicas, conservadoras y no quirúrgicas.
Algunos pacientes prefieren los remedios caseros, pero su uso en la mayoría de los casos no aporta el beneficio necesario, provocando una mayor progresión de la enfermedad.
Tratamiento con láser
La coagulación con láser es una medida eficaz para suprimir las manifestaciones sintomáticas de la enfermedad. Bajo la influencia de un rayo láser, la vena problemática se suelda y luego se corta del sistema circulatorio. Durante la intervención quirúrgica, se introduce un conductor en el vaso enfermo, a través del cual se realiza la obliteración. Con el tiempo, la vena operada es reemplazada por tejido conectivo.
EVLT ofrece una solución eficaz comparable a la escisión quirúrgica de venas, utilizada para la enfermedad.
La operación se caracteriza por un trauma mínimo y dura aproximadamente 40 minutos. El paciente no pierde su capacidad para trabajar. Al día siguiente podrá regresar a su lugar de trabajo.
Las cualidades positivas de la coagulación con láser son:

- sin incisiones en la piel;
- corto tiempo quirúrgico;
- período de rehabilitación acelerado;
- toda la operación se lleva a cabo bajo control constante de equipos de ultrasonido, lo que reduce el riesgo de errores médicos;
- después de la cirugía láser, no hay grandes hematomas ni hematomas.
Los aspectos negativos del tratamiento de venas con láser incluyen el alto costo y la imposibilidad de realizar cirugía en vasos grandes. Con venas grandes, existe riesgo de complicaciones: el vaso se desprende espontáneamente y regresa al sistema circulatorio general.
ablación por radiofrecuencia
Una técnica eficaz ayuda a eliminar las enfermedades venosas, pero en la mayoría de los países no está disponible para la población general. Durante la operación, se inserta un catéter de radiofrecuencia en el vaso dañado, con la ayuda del cual se bloquea la circulación sanguínea allí.
La ablación es tan eficaz como la coagulación con láser, pero se utiliza con mucha menos frecuencia. Se presentan las cualidades positivas de la herramienta quirúrgica:
- la operación se realiza de forma ambulatoria;
- se utiliza anestesia local;
- sin pérdida de rendimiento;
- no hay necesidad de incisiones quirúrgicas;
- después de la operación, el paciente se recupera en media hora y después de una semana puede volver al entrenamiento deportivo;
- en el postoperatorio no hay sensaciones dolorosas ni hematomas;
- el procedimiento tiene un alto nivel de seguridad.

Los aspectos negativos de la intervención quirúrgica están representados por el elevado precio y el posible riesgo de quemaduras térmicas. El día de la cirugía, el paciente no puede conducir un vehículo ni realizar trabajos que requieran mayor atención.
La ablación por radiofrecuencia se utiliza con menos frecuencia que la irradiación con láser.
Terapia con medicamentos
Los métodos conservadores para resolver el problema de las venas dañadas implican el uso de medicamentos locales: ungüentos, geles, cremas y aerosoles. Usos de dirección no quirúrgica:
- corticosteroides — para reducir la migración de leucocitos, suprimir las reacciones inflamatorias, las manifestaciones alérgicas y la constricción de las venas;
- medicamentos antiinflamatorios no esteroides - aliviar la hinchazón de los tejidos, se utilizan para aliviar el dolor, prevenir la agregación plaquetaria y aliviar la inflamación;
- medicamentos antitrombosis — prevenir la formación de coágulos de sangre, disolverlos en las venas;
- Flebotónicos: sustancias que aumentan el tono de las paredes de las venas y mejoran la circulación sanguínea local.
En un enfoque conservador, se pueden utilizar medicamentos antiinflamatorios, venotónicos y anticoagulantes orales.
La técnica no quirúrgica se lleva a cabo en las primeras etapas del desarrollo de las venas varicosas, lleva tiempo y requiere un uso sistemático.
Los métodos conservadores no permiten deshacerse de las arañas vasculares ni de los grandes nudos formados. Son necesarios para detener la progresión de la enfermedad y mantener el nivel de tono vascular. El uso correcto del enfoque conservador elimina el desarrollo de complicaciones: trombosis, ulceraciones tróficas, tromboflebitis.
medicina tradicional
Las recetas caseras son tácticas no quirúrgicas y no son una solución eficaz en la lucha contra las enfermedades venosas. Los tés, infusiones, decocciones, compresas y lociones comunes no han sido objeto de estudios clínicos serios y no pueden incluirse en el subgrupo de métodos eficaces de tratamiento conservador de la enfermedad.
Los partidarios de la medicina tradicional corren el riesgo de desarrollar enfermedades venosas, que requerirán una intervención quirúrgica. Los principales síntomas de las varices requieren ayuda profesional y no recetas tradicionales "probadas".
¡Atención!
El entusiasmo excesivo por las recetas populares puede provocar complicaciones en forma de úlceras tróficas.
Medias y leotardos para varices

Las medias de compresión se utilizan en todas las etapas de la enfermedad. La dirección conservadora ayuda a estabilizar la circulación sanguínea en las venas problemáticas y mejorar la salud general.
Su médico selecciona las prendas de compresión según la presión y el tamaño. La técnica es una medida eficaz para restablecer de forma no quirúrgica el flujo sanguíneo en las venas, pero no garantiza una curación del 100% de la enfermedad.
hidroterapia
La calidad positiva del agua radica en el efecto de compresión y relajación de las venas. Se utiliza una técnica no quirúrgica para mejorar la elasticidad vascular.
El tratamiento conservador eficaz se utiliza sólo en las primeras etapas de la enfermedad.
Durante los procedimientos, la temperatura del líquido cambia alternativamente, de baja a alta y viceversa.
Escleroterapia
Una opción no quirúrgica para eliminar las venas problemáticas. Se inyecta una sustancia especial en el recipiente, lo pega y con el tiempo se absorbe. El flujo sanguíneo se redistribuye a lo largo de vasos sanguíneos sanos.
Durante una sesión, se pueden administrar hasta cuatro inyecciones, el número de manipulaciones está determinado por la gravedad de la enfermedad. Después del procedimiento, se colocan prendas de compresión en el miembro inferior y el paciente debe caminar para evitar que se formen coágulos de sangre en las venas.
La escleroterapia muestra suficiente eficacia para acelerar la circulación sanguínea, aliviar la hinchazón, el dolor, las condiciones convulsivas y el aumento de la fatiga. Inicialmente, se pueden formar manchas de pigmento a lo largo de la vena, que desaparecen espontáneamente con el tiempo.

El método no quirúrgico es eficaz, proporciona resultados terapéuticos y cosméticos duraderos y, si la operación tiene éxito, durante toda la vida. El 25% de los pacientes con formas avanzadas de la enfermedad no obtienen un alivio completo de la enfermedad. Sus signos sintomáticos de venas varicosas se reducen significativamente.
La técnica no es aplicable bajo las siguientes condiciones:
- con reacciones alérgicas espontáneas a los esclerosantes;
- al realizar un tratamiento conservador: medicamentos hormonales o antiinflamatorios;
- exceso de peso con obesidad de diversos grados;
- si se registran formas avanzadas de celulitis en las venas dañadas;
- para enfermedades inflamatorias y purulentas de la epidermis;
- durante el período de gestación;
- con tromboflebitis.
Se presentan las cualidades positivas del método no quirúrgico:
- tipo ambulatorio, ausencia de postoperatorio prolongado;
- resultado efectivo: no quedan cicatrices ni cicatrices en la piel;
- ausencia de dolor intenso durante la cirugía;
- Posibilidad de tratamiento simultáneo de varias venas.
Las desventajas son la falta de garantías en cuanto a la conservación de los resultados de por vida. Para contraerlo, es necesario deshacerse de la fuente original de la enfermedad. No a todos los pacientes les gusta usar medias de compresión las 24 horas del día, que solo se pueden quitar durante los procedimientos de higiene.
extirpación quirúrgica
La cirugía se utiliza cuando el tratamiento conservador no quirúrgico es ineficaz. La flebectomía es una solución radical al problema de las varices, que implica su extirpación.
Como cualquier procedimiento quirúrgico, la operación requiere un largo tiempo de recuperación.
crioterapia

Es eficaz en el tratamiento de las varices. La base de la operación es la reacción de las zonas problemáticas a temperaturas frías, realizada con nitrógeno líquido. La influencia de terceros provoca la activación de mecanismos protectores, acelerando el proceso de regeneración de las estructuras celulares, aumentando el tono vascular y estabilizando el funcionamiento del sistema circulatorio.
Durante el procedimiento, primero se produce un espasmo agudo de las venas, seguido de una expansión instantánea que mejora la circulación sanguínea. Dependiendo del estado del cuerpo y del progreso de la enfermedad, pueden ser necesarias cinco sesiones de crioterapia.
Ozonoterapia para las varices
La exposición al oxígeno le permite lograr rápidamente los resultados deseados. El tratamiento no quirúrgico se lleva a cabo utilizando una forma gaseosa de ozono proporcionada por un equipo especializado.
El método permite enriquecer las células con oxígeno, acelerar los mecanismos de recuperación y normalizar el paso de la sangre por las venas.
La ozonoterapia se lleva a cabo en varias etapas, el número de manipulaciones depende de la gravedad de la enfermedad y las características de su curso. El régimen de tratamiento mínimo requiere 6 sesiones, el máximo incluye 12 procedimientos.
Presoterapia para varices

Las tácticas no quirúrgicas incluyen los principios de las sesiones de masaje y la mejora de las funciones de drenaje de las estructuras de los tejidos. Durante la manipulación se utiliza un traje especial al que se bombea aire comprimido. El resultado del impacto es el movimiento normal del líquido linfático y la sangre a lo largo de las carreteras, lo que permite la normalización de la circulación sanguínea local.
La técnica elimina el líquido acumulado que tiene un efecto negativo en las venas. Después de la primera etapa, los pacientes notan un alivio en las extremidades inferiores: reducción del dolor, la hinchazón y los calambres. El curso del tratamiento se determina estrictamente individualmente, en función de los indicadores del examen de diagnóstico.
Reseñas
Según especialistas y pacientes, cada técnica tiene muchas cualidades positivas y negativas. Lo único en lo que se diferencian es en la posibilidad de utilizar recetas populares.
Conclusión
Las tácticas conservadoras, quirúrgicas y no quirúrgicas pueden ayudarlo a deshacerse del dolor en las piernas, los calambres nocturnos y la hinchazón. La elección final del tratamiento adecuado recae en el médico tratante. Los flebólogos recomiendan no dejarse llevar por las recetas tradicionales, sino buscar ayuda profesional en cuanto aparezcan los primeros síntomas clínicos.
























